AVILA: LA MONTAÑA AMURALLADA.

Citar Ávila es visualizar su muralla perfecta, sus palacios medievales, iglesias románicas, Santa Teresa y sus yemas, y como olvidarnos de sus chuletones!!!!!!!!

Se me acaba de hacer la boca agua.............relax, vamos a caminar un buen rato, luego calmaremos el apetito en uno de sus restaurantes, con un buen chuletón o lo que se tercie.

Llegada a las proximidades de la ciudad y nos sorprende un precioso amanecer desde el mirador de los cuatro postes, sin duda un lugar de lujo para iniciar el día. A sus pies discurre el Río Adaja, al fondo, como para no verla !!!!, la gran muralla de Ávila.
Las vistas desde este humilladero (pequeña ermita a las afueras de la población) de San Sebastián son puro espectáculo, buena premonición de todo el encanto que encierra esta preciosa ciudad.

 

Abandonamos el mirador y ahora si nos dirigimos a la Ciudad, un pero.....el aparcamiento, nos coincidió uno de esos días que está todo petado hasta en los aparcamientos privados, el inconveniente de tratarse de una ciudad bandera !!!!!, si puedes elige un trasporte alternativo.

.....entramos por la puerta del Alcázar y empezamos el deambular por ls proximidades de su muralla , dos kilómetros y medio de longitud, tres metros de espesor y una media de 12 de altura, 88 torreones y nueve puertas., de finales del siglo XI.

Posiblemente estemos hablando de una de las murallas mejor conservadas de Europa y si además eres observador, durante el recorrido, en sus piedras puedes ir imaginando trozos de historia.
Pero Ávila no es solo muralla, en próximas entradas iremos desmenuzando un poco el recorrido.

La historia dice que hacia 1109, el belicoso Alfonso I el Batallador, rey de Aragón, se esposa con Doña Urraca, reina de Castilla, un matrimonio de conveniencia, nunca se llevaron bien, ninguno de los dos cedió poder y territorio al otro y continuaron reinando en sus respectivos territorios.
Urraca, una mujer de recio carácter, tenía un hijo de su matrimonio previo con Raimundo de Borgoña de nombre Alfonso que, en principio, heredaría el reino de su madre. Para Alfonso el Batallador el niño representaba un obstáculo para hacerse con el reino castellano así que hostigó a su esposa que huyó con el crío ayudada por algunos nobles afines.
El niño es trasladado a la ciudad de Ávila ya que sus dirigentes, encabezados por Blasco Jimeno, son partidarios de que Castilla siguiera siendo independiente y no se anexionase al reino de Aragón.
El padrastro aragonés llega a Ávila con fines poco “paternales”, deseando apoderarse del crío que tantos quebraderos de cabeza le está ocasionando y pide que se lo entreguen, que el será su tutor pero, la respuesta desde dentro de la muralla es No es No, que el Niño Rey se queda en Ávila..... si te apetece conocer el resto de la historia, la realidad de nuestra historia, puedes hacerlo en esta estupenda pagina http://muralladeavila.com/es/leyendas/el-rey-nino

Esto es todo, si te ha gustado, o deseas ver alguna más de mis entradas, puedes hacerlo en: MIMUNDOTUMUNDOELDETODOS https://veiga-confurco.blogspot.com/